CRÉATE EN CASA Y MÁS

Como socio de ANPEC, he recibido este correo que quisiera compartir con vosotr@s:

Como se puede imaginar, todas las actividades de la asociación que se estaban gestionando y tenían una fecha de celebración fijada han quedado en suspenso, debido a la crisis sanitaria que estamos sufriendo. En cuanto sea posible retomar estos proyectos, tanto cursos como exposiciones o cualquier otra actividad que se permita, informaremos sobre nuevas fechas.

  • Una manera de animar y promover el contacto entre nuestros asociados, y otros ceramistas, es la nueva iniciativa que lanzamos: CRÉATE EN CASA. En ella se anima a todos los ceramistas a que nos envíen una imagen divertida, curiosa y creativa de lo que supone la creación cerámica en el obligado entorno doméstico. También se agradecen imágenes de obras realizadas (o en proceso) durante el confinamiento. Posteriormente se recopilarán estas imágenes en un vídeo conjunto, que demostrará el ingenio que conservamos los ceramistas para no detener nuestra actividad. 


ANPEC quiere trasladar también el mensaje que hemos recibido por parte de la Asociación de Ceramología, en concreto de su presidente Jaume Coll Conesa, al que agradecemos mucho sus palabras. (Al final de esta entrada)

-También queremos informar de algunos de los proveedores de materias primas y demás útiles para la elaboración cerámica que se pueden contactar en estos momentos en Manises:

  • VICENTE DÍEZ ha implantado el servicio a domicilio para todo su catálogo, pasando tu pedido a las direcciones de e-mail: vdiez@vdiez.com o maria@vdiez.com
  • MONTESA volvió a abrir sus puertas desde el martes 14 de abril, en horario de 07:00 a 15:00 horas, manteniendo activo el protocolo de contingencia interna puesto en marcha tras la declaración del estado de alarma. 
  • PRODESCO  mantiene cerrada la tienda, así como cualquier actividad presencial, pero atienden por email en la medida de lo posible en admon@prodesco.es

Invitamos a los socios a visitar la ahora estremecedora exposición virtual "TIME", de Susana López Fernandez, en la Galería Artágora. https://www.artagora.es/epages/ec3557.sf/es_ES/?ObjectPath=/Shops/ec3557/Categories/Time_de_Susana_Lopez_Fernandez

Cerámica y confinamiento
Queridos compañeros. En esta situación especial espero que todos y vuestras familias os encontréis bien, aunque sé que alguno de vosotros ha sufrido pérdidas de familiares y amigos por lo que deseo ofreceros mis condolencias y mi solidaridad, así como apoyo y ánimo para todos.

Hace ya cuatro semanas que vivimos unas circunstancias extraordinarias que han transformado nuestra vida cotidiana hasta extremos inimaginables. A la crisis sanitaria se ha unido una crisis económica de enormes proporciones y alcance. Nuestros sanitarios se han visto sobrepasados por la complejidad del proceso infeccioso, por la magnitud de su intensidad y por los largos tiempos requeridos por muchos de los pacientes en unidades de cuidados intensivos. Todos se han entregado con auténtica voluntad de servicio, más allá de las exigencias laborales ordinarias, y algunos incluso han ofrecido literalmente su vida. Las circunstancias han obligado a las autoridades de todos los países del mundo a decretar el confinamiento y a adoptar medidas extraordinarias de abastecimiento de la población recluida, implicando al sector primario, al de distribución y venta de bienes de primera necesidad, a las farmacias, al mundo de la prensa, a la seguridad privada, a las empresas de limpieza y a todos los servicios esenciales para continuar cumpliendo con su servicio, lo que sus trabajadores han asumido de forma ejemplar. La sociedad se ha visto arrastrada también a aplicar una acción de control en la que las fuerzas de seguridad, los cuerpos de asistencia en emergencia, protección civil y ejército, han tenido que asumir papeles tanto de apoyo a la ciudadanía como de represión de conductas insolidarias, pagando también un alto precio por su esfuerzo a veces incomprendido. Las restricciones de movilidad generan también dificultades en los desplazamientos que se convierten en críticas en sectores esenciales dada la imposibilidad de contar con mano de obra. Afortunadamente, la ciudadanía responsable ha comprendido la gravedad de la situación y ha apoyado mayoritariamente las medidas adoptadas en un esfuerzo colectivo por minimizar los efectos de la pandemia.

Los daños económicos son enormes y en el campo de la cerámica la situación es muy compleja.

Las PYME, formadas en su mayoría por empresas familiares o con escaso personal y en una crónica situación de crisis del sector en venta de productos decorativos no esenciales, están asumiendo una paralización económica en producción y venta, repercutiendo en falta de ingresos, desempleo y situaciones de complejidad administrativa para conseguir el apoyo ofrecido por las instituciones públicas. El sector cerámico industrial también ha vivido la necesidad de activar procesos de ERTE, la paralización de la producción y la venta, afrontar la pérdida de clientes y mercados ante la competencia exterior por no poder suministrar en el momento comprometido, la restricción de actividades comerciales y la caída de la demanda por la paralización de la construcción. 

Frente a ello han privilegiado soluciones de teletrabajo y reducido la presencia de empleados en las empresas al mínimo indispensable, aunque la paralización, reorganización y reactivación ulterior de la producción precisa de costes económicos suplementarios y no contabilizados en las previsiones. 

Ante el grave impacto económico, la sociedad se está volcando en ofrecer soluciones en aplazamientos de pagos, quitas, ofrecimiento de créditos, creación de fondos de contención y de mutualización, etc.

Las instituciones culturales sufrieron la temprana anulación de la visita pública, su principal canal de conexión con la sociedad. También han visto detenidos sus programas tanto culturales como de inversiones, reduciendo su acción a las actuaciones más básicas de seguridad, limpieza y mantenimiento, y han recortado sus presupuestos. Han tenido que reinventarse potenciando sus contenidos virtuales aunque en un entorno difícilmente adaptado por carencias en infraestructuras y en capacidades operativas, económicas y/ o de personal. Como muestra de adaptación a la nueva situación, dentro de las posibles ofertas solidarias para facilitar sostener las cargas económicas que nos atenazan, la AIC de Ginebra ha ofrecido prolongar a todo el año el periodo de abono de cuotas en diversas modalidades e incluso su anulación. En las instituciones culturales se nos abren nuevas incógnitas: cómo haremos frente a la nueva situación, qué medidas deberemos tomar ante la oferta de eventos con público, de qué fondos y créditos podremos disponer para ello, si la nueva situación afectará a nuestra masa laboral ante el aumento del coste de nuestras actividades en relación con el público beneficiado, e incluso cómo serán las relaciones personales ante las medidas de prevención, sanidad, etc. Nuestra acción cotidiana tiene un indudable retorno económico en empresas de servicio, tanto las que trabajan directamente en nuestros programas (diseño, difusión, educación, vigilancia, conservación-restauración, servicios técnicos especializados) como en las que atienden externamente a nuestro público (hostelería y restauración, transporte, turismo, comercio cultural o de obsequio, etc.). Las instituciones dependientes de las AAPP, en especial las de gestión delegada no autónoma, sufrirán previsiblemente además mayores dificultades de gestión, ahora ya de por sí complejas ante la configuración de la estructura de gasto y de los anticipos de caja que se les otorgan, muchas veces en partidas inadecuadas o excesivamente rígidas. Posiblemente todos tendremos que realizar un esfuerzo personal mayor incluso aportando medios propios, para continuar con las acciones de difusión, comunicación, atención al público, formación o investigación.

La cultura y el conocimiento son esenciales, son inherentes al espíritu humano y en nuestro día a día nos enriquecen, nos abren la visión sobre el mundo y son nuestros principales motores porque nos aportan incluso gozo de vivir y un imprescindible sustento espiritual y moral. Deberemos estar vigilantes porque para el totalitarismo y el instrumentalismo son prescindibles. La cultura y el conocimiento molestan, entorpecen y boicotean esos “objetivos primordiales” que algunos manipuladores de la humanidad impulsan alegando diversas razones que no son el bien general.

Los sectores involucrados en cultura y conocimiento se encuentran ante un nuevo fiel de la balanza cuando aún no habíamos recuperado la normalidad tras la crisis del 2008.

Pero yo confío en que la capacidad de trabajo, de esfuerzo y de ilusión que, en nuestro campo todos tenéis, nos permitirán seguir adelante en todos los proyectos que impulsamos cada uno de nosotros. Tal vez tendremos que reinventar la manera de reunirnos de nuevo o de trabajar, pero estoy convencido de que encontraremos soluciones. Seguimos trabajando, seguimos adelante y ajustaremos los objetivos a las posibilidades disponibles sin detenernos.

Lo conseguiremos. Ya falta menos. Un fuerte abrazo a todos.

Jaume Coll Conesa
Presidente de la AC

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