TALLER DE TORNO: VAMOS A HACER UNA QUESERA

Este fin de semana vamos a continuar con los talleres del Proyecto TIERRA 2019 con la elaboración de una pieza  a torno.

Siempre que se trabaja a la rueda, la primera tarea que se presenta es la preparación de la arcilla, a la que vamos a amasar para eliminar las burbujas de aire y darle plasticidad. 

Es una tarea que vamos a repetir cada vez que iniciemos un trabajo en el taller, por lo que evitaremos repetir el mismo texto en cada entrada.


Con los pulgares, vamos a abrir la pella despacio hasta hacer una pieza abierta, como un cuenco, que dado la vuelta, servirá de cobertera. 

Una vez abierta la pieza con los dedos de ambas manos vamos a lanzar una "tirada" para levantar las paredes y hacerlas finas. A continuación usaremos para el exterior una "media luna" de metal para rascar y alisar las paredes y posteriormente haremos otro tanto con el interior de la pieza. 


El resultado debería parecerse a un cuenco semiesférico con una boca de unos 25 cm de paredes finas y con más cantidad de barro en la base. Cuando se haya secado un poco la pieza y podamos manipularla con seguridad, vamos a cortar la base, separarla del disco de torno y a darle la vuelta, dejando la parte más estrecha (y con más arcilla) arriba.


Con el barro sobrante en la base, una vez dado la vuelta, vamos a elaborar el pomo que servirá para agarrar la pieza. Para ello una vez abierta esta forma debemos acceder con los dedos a su interior, vamos estrechando el labio hasta conseguir finalizar el pomo.



Curiosamente, he encontrado una forma distinta para hacer este tipo de piezas que transcribo a continuación:

Una vez preparada una pella, la colocamos en el disco de torno y tras centrarla aplanamos hacia afuera hasta alcanzar el diámetro con el queremos trabajar. Con lo pulgares, abrimos la pella y comenzamos a ahuecar la arcilla para hacer  una especie de cuenco de base plana.

Cuando el barro que forma un borde alrededor de la arcilla tenga un centímetro y medio aproximadamente, comenzaremos a levantar las paredes. Queremos hacer una forma de campana redondeada que será la cobertura de la bandeja.

Al acercarnos a la parte alta, alcanzaremos la pieza por dentro a través de la abertura estrechada para acabar el hinchamiento.

En ambos casos, una vez alisadas las paredes exterior e interior, usando un pequeño vaciador, recortamos el labio inferior de la cobertera para darle un aspecto redondeado.

Si la pieza se nos ha hundido un poco, podemos inflar la forma de cúpula soplando suavemente a través del caño del agarradero. Miramos el diámetro de la pieza para habar la bandeja que se ajuste a la misma de tal forma que la tapa quede lo más precisa al interior del borde de la bandeja.

Ahora vamos con la bandeja:

Para hacer la pieza, centramos la arcilla en la rueda del torno. Comenzamos a extender la pasta comprobando al hacerlo la medida del diámetro. Formamos una pequeña pared de unos dos centímetros de altura el el límite exterior de la arcilla a la vez que establecemos la forma de esta pared que deberá quedar como un pequeño plato. Con un rascador de tornear alisamos la superficie de la bandeja y le hacemos un borde cortado a su curva interior. 


Cuando ambas piezas estén en dureza de cuero las retornearemos para darle su forma definitiva afinando, aún más, las paredes de la cobertera y el grosor de la bandeja.


Para la decoración vamos a trabajar con un esmalte a partir de óxido de manganeso y feldespato al que vamos a practicar una serie de marcas esgrafiadas.

Colocamos la cobertera en la rueda, la centramos y con un poco de arcilla la fijamos para evitar que se desplace. Al poner en marcha el torno, la pieza gira y aplicamos un pincel bañado en el esmalte indicado en un punto de la misma en una técnica llamada "fileteado" que permite, sin mover el pincel, hacer líneas decorativas de distinta anchura en la pieza.

Con un tenedor, un punzón o cualquier herramienta que pueda producir rayas en la arcilla, hacemos girar la rueda y rasgamos la superficie pintada antes de que se seque con algún motivo que nos guste. El esgrafiado pondrá a la vista el color más claro de la arcilla debajo del esmalte y producirá un atractivo dibujo. Cuando la pieza esté completamente seca, podremos cepillar el exceso de esmalte que forma rebabas en la superficie.

La bandera puede ser decorada de forma análoga a lo hecho con la cobertera. Estos son algunos de los resultados del taller:




Una vez cocida la pieza, mostraremos el resultado en esta misma entrada.

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