EN LA RETINA DE SEBALD: HISTORIA por José Palacio
HISTORIA, Por José Palacio
La forma que articula la obra sebaldiana es la red. Los caminos cruzados: un sistema multiplicador de pisadas y citas. Unidades mínimas de significado: las pisadas del escritor viajero y de los emigrados con que se encuentra; las citas que va tejiendo en sus libros de los paisajes. “Flaubert veía el Sáhara entero”, leemos en los anillos de Saturno, su libro más influyente en el arte contemporáneo, en un grano de arena oculto en el dobladillo de un vestido de invierno de Emma Bovary, y según él, cada átomo pesaba tanto como la cordillera del Atlas”.
De lo micro a lo macro en la misma oración: ese movimiento es profundamente sebaldiano. Del cuerpo del hombre que camina a la ruta de pasos vistos desde el aire; al punto en el mapa.
La literatura es miniatura, pero aspira a representar lo complejo, lo enorme, un universo que se expanda como una membrana cuántica en tu mente, lector.
José Palacio presenta “TRES TIERRAS”. Una pieza que nos muestra tres puntos de partida de un camino que vamos a transitar por tres arcillas, tres esmaltes, tres sensaciones.
TRES TIERRAS: FASE I. Gres refractario
LOS OJOS CIEGOS 1939-1975. Refugiados del exilio Interior
TRES TIERRAS: FASE II. Pasta refractaria Albina
PORTBOU 1939. Refugiados del Exilio Republicano español
TRES TIERRAS: FASE III. Pasta refractaria negra
IDOMENI 2016. Refugiados del Exilio Sirio
LOS OJOS CIEGOS 1939-1975. Refugiados del exilio Interior
TRES TIERRAS: FASE II. Pasta refractaria Albina
PORTBOU 1939. Refugiados del Exilio Republicano español
TRES TIERRAS: FASE III. Pasta refractaria negra
IDOMENI 2016. Refugiados del Exilio Sirio
Grandes piezas para mostrarnos la capacidad de lo “macro” y un punto de salida que proporcionalmente es microscópico para iniciar los pasos de nuestra Historia.
Serán estos tres caminos los que se vistan de literatura dándole valor y forma.
TRES TIERRAS nos lleva al camino del Exilio y a su paso por Port Bou, para salir del terror; nos lleva al camino del regreso, a las noches en vela con miedos en el otro Exilio, el interior; y deja el tercer camino para nuevos exiliados, ahora refugiados de otras guerras y otros odios, ignorados y utilizados, masacrados y encerrados. Un camino para muchos y muchas sin retorno, pero sin meta.
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